El Sámano cae con claridad en San Vicente
No es bueno poner como excusa la actuación arbitral cuando se pierde y más si no juegas precisamente tu mejor partido, como es el caso. Pero dicho esto, lo de los colegiados con el conjunto de Vallegón comienza a ser de traca. Estaba el encuentro igualado, con ocasiones por ambos lados (Igor y Velar pudieron adelantar al Sámano, y Toño evitó dos goles locales con buenas paradas), cuando el árbitro decidió entrar en escena. En un balón dividido en el vértice del área, Galder fue al suelo cortando el balón, pero el colegiado señaló penalti y los locales no perdonarían el regalo.
Con esa polémica jugada llegaríamos al periodo de descanso. Necesitaba reaccionar el Sámano, olvidarse de la jugada y meterse de nuevo en el encuentro. Pero nada de eso sucedió, ya que en el inicio del segundo tiempo el conjunto local consiguió ampliar la ventaja en el marcador. En un intento de sacar la pelota jugada desde atrás, la defensa de Vallegón perdió el balón provocando una contra con superioridad de hombres del Barquereño para hacer el 2-0.
Se ponía muy cuesta arriba el partido. Y más aún cuando el colegiado le perdonó la segunda amarilla al mediocentro del conjunto de San Vicente. Carlos Liaño se llevó un balón que botaba en el centro del campo y el jugador local llegó tarde impactando sus tacos en el pecho de nuestro capitán. Entrada muy similar a la de De Jong, aunque más leve. El colegiado, con la mano en el bolsillo, fue decidido a mostrar la cartulina amarilla, pero cuando fue a mostrársela se arrepintió y ¡se la guardó! Acto seguido el entrenador local con buen criterio decidió destituir a su jugador.
Pocos minutos después, en una buena combinación del Sámano, Igor fue derribado dentro del área pero el trencilla decidió no pitar nada. El árbitro había sacado de quicio a un Sámano que no entró en el partido, todo lo contrario que su rival que estuvo muy seguro atrás y muy eficaz en el área defendia por Toño.
Intentó apretar el conjunto de Javi Solís y lo consiguió durante los últimos minutos, si bien es cierto que solo creó una ocasión de peligro por mediación de Velar en una falta. Y con el Sámano volcado llegaría el tercer y definitivo tanto en una buena maniobra de su delantero, que disparó ajustado a la base del palo desde fuera del área. Un mal partido de los nuestros, añadido a la eficacia del Barquereño y a ciertas decisiones arbitrales, provocaron una nueva derrota del Sámano lejos de Vallegón.